¿Cómo afecta la microgravedad a su salud? Una de las principales preocupaciones de los astronautas de la NASA en estos días son los cambios en la vista. Algunas personas regresan de estancias de larga duración en el espacio con lo que parecen ser cambios permanentes, como requerir anteojos cuando antes no lo hacían.
Y los números son interesantes. Unos meses después de que la NASA le dijera a la revista Space que el 20% de los astronautas pueden enfrentar este problema, un nuevo estudio señala que 21 astronautas estadounidenses que han volado en la Estación Espacial Internacional para vuelos largos (que tienden a ser de cinco a seis meses) se enfrentan visualmente problemas.
Estos incluyen "desplazamiento hipermetrópico, escotoma y pliegues coroidales a manchas de algodón, distensión de la vaina del nervio óptico, aplanamiento del globo y edema del nervio óptico", afirma la Universidad de Houston, que está colaborando con la NASA en un estudio a largo plazo de astronautas mientras Están en órbita.
La NASA está volando un instrumento a bordo de la Estación Espacial Internacional que realiza tomografía de coherencia óptica, que actúa como un microscopio en el ojo. La tecnología analiza cosas como la presión en el ojo y los cambios en el nervio óptico y las estructuras retinianas.
La colaboración con la Universidad de Houston ganó recientemente el Premio Anual de Investigación Xtreme 2014 de Heidelberg Engineering. A largo plazo, los investigadores involucrados esperan descubrir qué cambios realizar para misiones de larga duración. Un ejemplo podría ser cambiar los niveles de dióxido de carbono en la estación, si se determina que desempeña un papel.
Las consideraciones de salud a largo plazo serán una cosa que se examinará de cerca cuando un astronauta y un cosmonauta pasen un año en la Estación Espacial Internacional en 2015, y su hito los llevará a un pequeño grupo de personas que han pasado un año o más consecutivamente en el espacio.
Fuente: Universidad de Houston